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¿quiénes somos?

JUCUM Coyoacán

«JUCUM Coyoacán» es una de las muchas locaciones de JUCUM en México y en el mundo, y comenzó gracias a la iniciativa de mucha gente por ver un Centro de Entrenamiento de JUCUM establecido en la ciudad de habla hispana de mayor influencia en la tierra: la Ciudad de México.

Nuestro Centro de Entrenamiento abrió sus puertas de manera oficial el 1ero de Julio del 2019.

Juventud con una Misión (JUCUM, o YWAM por sus siglas en inglés) es un movimiento fundado en 1960 por Loren Cunningham con el propósito de cumplir la Gran Comisión.

La Universidad de las Naciones (UofN) fue fundada por Loren en colaboración con el DR. Howard Malmstadt, como una organización de entrenamiento misional en 1978, y que enseña principios bíblicos para hacer avanzar el mismo mandato de Cristo a través de la visión y el ministerio de JUCUM.

«JUCUM Coyoacán» es una de las muchas locaciones de JUCUM en México, y surgió a partir de la iniciativa de varias personas por ver una base en el área de mayor influencia en el país: La Ciudad de México. La base inició oficialmente el 1ero de Julio del 2019.

Nuestra misión es entrenar, equipar, movilizar y enviar líderes jóvenes y miembros del cuerpo de Cristo – de México y de cualquier otra nación – al mundo para compartir el mensaje del amor de Dios.

En «JUCUM Coyoacán» estamos apasionadamente convencidos de querer «dar de gracia lo que de gracia hemos recibido» a través de los muchos años del trabajo de misioneros, pastores, ministros, congregaciones e iglesias de otros países en nuestra nación. México es un país que tiene mucho que aportar al cumplimiento de la Gran Comisión y el establecimiento del Reino de Dios alrededor del mundo, y es una tierra donde los nuevos y nacientes misioneros pueden ser entrenados para «dar el salto.» 

Nuestro llamado es ser un terreno de entrenamiento, y servir como plataforma de movilización e impulso. Ser un punto de conexión con otras naciones y esferas de la sociedad para facilitar tu acceso al lugar a la que te ha llamado Dios y que puedas así cumplir tu parte en el establecimiento de Su Reino en la tierra. Y principalmente para ayudarte en tu proceso de «Conocer a Dios – Su Palabra y voluntad – y darlo a conocer.»