¡Hola, amigos!
Anteriormente escribimos acerca de lo que Dios había estado hablando a nuestro equipo. También, les informamos que dedicaríamos unos días para buscarlo [a Dios] en ayuno y oración, y que los mantendríamos informados. ¡El día ha llegado! Y es muy alentador saber que el Señor Jesucristo ha compartido su corazón con la iglesia mundial – ¡nosotros incluidos!
Viernes, Sábado y Domingo de Pascua pasamos momentos de comunión íntima con el Señor. La expectativa que muchos teníamos – o la mía – era escuchar su voz y conocer sus planes con respecto al futuro. Me sorprendió, aunque de manera muy positiva, que Él solamente quisiera pasar tiempo con nosotros.
Y es que aunque todo tiene un propósito, y lo que le sucede a la humanidad hoy en día no es la excepción, fue reconfortante descansar en Dios sabiendo que NO TODO es acerca del siguiente paso. Aprovechando la ocasión, y sin que lo supiéramos, El Señor nos estaba haciendo una invitación a la intimidad. ¿Se imaginan? El Creador del universo nos llamaba a pasar tiempo de calidad con él ¡y vaya que los disfrutamos! Así que sin más preámbulo aquí les dejamos lo que recibimos, no sin antes recordarles considerar todo con el filtro del discernimiento del Espíritu De Dios.
«El Señor está humildeando (humbling) al mundo.» Con esta frase abrimos la bitácora pasada, y con ello tuvimos la certeza de que Dios NO estaba juzgando al mundo – y es que un juicio trae consigo castigo y destrucción, y aunque la situación actual estableció un alto total para el mundo, se prestó para que los creyentes atendiéramos la invitación a pasar tiempo a solas con Dios. Además, Sofonías 3.5 ya lo confirmaba: «el Señor está en la ciudad, él no hace nada malo.»
Uno de los miembros del equipo de liderazgo de nuestra base decía tener la impresión de que durante los primeros meses del año la maldad estaba manteniendo una presencia «cínica y desvergonzada.» Si esto fue cierto, el Señor pudo haber aprovechado el COVID-19 para ponerle un alto al mundo terrenal, y al espiritual. Es como si el virus hubiese sido una medida preventiva y de contención para ambos planos. #odulceironia Ahora, el reconocimiento de la maldad debería llevarnos al arrepentimiento, y en el caso de la iglesia a la intercesión. Y como es bien sabido, el arrepentimiento trae consigo la libertad y apertura necesarias para adentrarnos en intimidad con Dios.
2.- Una vez aceptada la invitación el Señor parecía darnos – a todos – un mismo mensaje:
- Protección. Es gracioso pensar que el simple hecho de quedarse en casa (y en nuestro caso, pasar tiempo con Dios) nos mantiene del riesgo de ser contagiados. Salmo 91: «Los que viven al amparo del Altísimo encontrarán descanso a la sombra del Todopoderoso. Declaro lo siguiente acerca del Señor: Sólo él es mi refugio, mi lugar seguro; él es mi Dios y en él confío.»
- Descanso. Durante un largo tiempo el Señor nos ha pedido – a YWAM ¡Hola! – tomar el día de descanso con la seriedad que merece. No es una recomendación, es un mandamiento, pero #parasersinceros seguimos aprendido a ejercer esta importante disciplina espiritual. La cuarentena, sin embargo, ¡nos deja dentro del contexto adecuado para ponerla por obra! El descanso además, ¡es hermano de la reconciliación! Salmo 130 y 131.
- Esperanza. La invitación a esperar pacientemente no se refiere al tiempo, sino a esperar con anticipación y expectativa. El Señor nos invitaba a recordar las promesas que nos había hecho, y a proyectar las formas en que podríamos sostener el generoso fruto de la cosecha que está por venir. Zacarías 8:9-14
- Expectativa. Así como el que siembra espera, esta temporada traerá sus frutos, y el año de progreso espiritual del que muchos hablaban en 2019 ¡será visible! El fruto será tanto que podremos compartir en abundancia ¡y la gente estará dispuesta a recibir! Sofonías 3;21; Zacarías 9:12
Durante los días que le siguieron a nuestro Fin de Semana con Jesús, uno de los mensajes que más sacudió nuestro espíritu fue el de «Un tiempo para morir», escrito por Tom Bloomer y citado en un publicación del blog de Lynn Green. Ambos, respetados y reconocidos líderes en YWAM. Debido al mensaje, decidimos ponernos voluntariamente en un proceso de introspección espiritual con Dios para saber si seguíamos en su voluntad, y dentro de sus planes. Pero más allá de una respuesta recibimos una confirmación: ¡Dios no solamente está con nuestro equipo, sino que también se goza en nosotros!
Lynn Green continuó extendiendo el mensaje de «La Poda» del que se habla en al artículo, y añadió lo que algunos amigos en Medio Oriente habían recibido por parte de Dios: «Hay una invitación del Señor en esta hora. Una invitación al arrepentimiento; al descanso; una invitación a la restauración; y a la preparación. Tómense un tiempo para considerar estas invitaciones, y hagan un espacio en sus horarios para responder.» (Pueden ver todo el mensaje, acá.)¡Quedamos impresionados! Arrepentimiento, Descanso, Restauración y Preparación. Los nombres eran diferentes pero el mensaje y su propósito era el mismo: pasar tiempo con Dios, descansar en él, afirmar nuestra identidad como hijos de Dios, y prepararse para lo que viene.
El 2020 ¡es un año de progreso! y aunque muchos no lo crean ¡el Señor está con nosotros! Cuéntanos, ¿cómo te estás preparando?